Editar] Véase también

Editar] Referencias

La Villa Médici en Roma, Pabellón de Cleopatra-Ariadna (1630). Captó con insólita modernidad el movimiento fluctuante de los reflejos, una técnica que desarrollarán los impresionistas.94

Cristo crucificado (1632).

El príncipe Baltasar Carlos cazador (1632-1636).

El bufón don Diego de Acedo, el primo (1634).

Menipo (1639).

La costurera (1640).

El llamado barbero del Papa (1649-50).

Último retrato de Felipe IV, hacia 1655.

1. abc Bardi, Documentación sobre el hombre y el artista, p. 83.

2. abcde Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 305-6.

3. Corpus velazqueño, p. 40; el 7 de noviembre de 1621 recibió el bautizo Francisca, la octava hermana de Velázquez, cuando este ya había sido padre de dos niñas.

4. Corpus velazqueño, pp. 25 y 346.

5. Baticle, Jeannine (1990). Velázquez, el pintor hidalgo. Madrid: Aguilar, S.A. de Ediciones. p. 12.

6. ab Ragusa, «La vida y el arte», p. 23.

7. abc Justi, «Velázquez y su siglo», pp. 119-121. El apellido paterno era Silva, aunque conforme a la costumbre portuguesa el padre del pintor anteponía el Rodríguez que había recibido de su madre.

8. Gállego, op. cit., p. 15.

9. Marías (1999), pp. 15-16.

10. ab Harris, «Biografía», pp. 424-425.

11. abc Pérez Sánchez, Velázquez y su arte, p. 24-26.

12. Marías (1999), pp. 16-17.

13. ab Corpus velazqueño, p. 28.

14. Gállego, op. cit., pp. 37-38.

15. abc Ragusa, «La vida y el arte», pp. 24-29.

16. Pacheco, El arte de la pintura, ed. de Bonaventura Bassegoda, pp. 527-528.

17. Ragusa, «Breve antología crítica», p. 183.

18. Harris, «Biografía», p. 424.

19. Marías (1999), pp. 18-21.

20. Marías (1999), p. 23. Las primeras obras al óleo que se conocen de Herrera, ya de 1614, muestran, por otra parte, a un pintor arcaico, que no se ha desprendido todavía del manierismo flamenquizante practicado en Sevilla en la anterior centuria.

21. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 7.

22. Ragusa, «Las obras maestras», p. 74.

23. Corpus velazqueño, p. 15.

24. Pacheco, El arte de la pintura, p. 527.

25. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 12.

26. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 15.

27. Marías (1999), pp. 27-32.

28. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 21.

29. ab Pérez Sánchez, Velázquez y su arte, p. 27-31.

30. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 12.

31. Azcarate, Velázquez pintor de la luz, p. 8.

32. López-Rey, Velázquez, p. 10.

33. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 34.

34. Calvo Serraller, op. cit., pp. 36-37.

35. abcd Pérez Sánchez, Velázquez y su arte, pág 31-32.

36. Casado, «Su vida y su época», p. 74.

37. ab Pérez Sánchez, Escuela española, p. 99.

38. Gállego, op. cit., p. 52.

39. Pacheco, El arte de la pintura, p. 527.

40. Calvo Serraller, op. cit., pp. 40-43.

41. La un tanto confusa información de Pacheco llevó a Palomino a suponer que el primer retrato de 1623 sería un retrato ecuestre, y así lo han defendido Justi y otros. Sobre ello, véanse las notas de Bonaventura Bassegoda a su edición de El arte de la pintura de Pacheco, pp. 204-205, y Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 45-47.

42. Corpus velazqueño, p. 57.

43. Marías (1999), pp. 54-55.

44. ab Pérez Sánchez, Escuela española, p. 104.

45. ab Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 60-61.

46. Marías (1999), p. 55.

47. ab Brown, Velázquez. La técnica del genio, p. 10.

48. Calvo Serraller, op. cit., p. 55-59.

49. Pérez Sánchez, Alfonso (2005). El retrato español del Greco a Picasso. catálogo de la exposición. Madrid, Museo del Prado. p. 344. ISBN 84-8480-066-0.

50. Marías (1999), pp. 64-67.

51. ab Azcarate, Velázquez pintor de la luz, p. 10.

52. ab López-Rey, Velázquez, p. 17.

53. «Rubens. Copista de Tiziano. Exposición de 1987 (Fernando Checa)». Museo Nacional del Prado. Consultado el 1 de enero de 2011.

54. «Colección de Pedro Pablo Rubens (Jeffrey M. Muller)». Museo Nacional del Prado. Consultado el 1 de enero de 2011.

55. Pacheco, El arte de la pintura, p. 202.

56. Palomino, p. 218.

57. ab Harris, «Biografía», p. 426.

58. Calvo Serraller, op. cit., p. 53.

59. Pérez Sánchez, Velázquez y su arte, pp. 35-36.

60. Gállego, op. cit., p. 74-75.

61. ab Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 69.

62. abcd Gállego, op. cit., pp. 76-80.

63. ab Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 70-77.

64. Garrido, pp. 212-217.

65. Morales y Marín, p. 108.

66. abc Gudiol, Velázquez, pp. 139-143.

67. ab Pérez Sánchez, Velázquez y su arte, pp. 36-37.

68. abc Harris, «Biografía», p. 426.

69. Palomino, p. 254.

70. Corpus velazqueño, pp. 89-193.

71. Palomino, p. 310.

72. Ragusa, «La vida y el arte», p. 49.

73. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 107-111.

74. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 907-104. López-Rey (1996, pp. 206-207) resta valor al documento aportado por Brown y Elliot para sostener la formación de la serie en ese año y adelanta la ejecución del llamado Calabacillas a 1628-1629 (p. 90).

75. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 148 y 174. Al contrario López-Rey (1996, pp. 246-249) sostiene que el bufón llamado al ingresar en el Museo del Prado Diego de Acedo, el Primo es precisamente el así llamado por Mazo en el viejo Alcázar.

76. Marías, Velázquez, pp. 80-84.

77. ab Azcarate, Velázquez pintor de la luz, p. 12.

78. Ragusa, «Las obras maestras», p. 124.

79. Azcarate, Velázquez pintor de la luz, p. 13.

80. Brown, Velázquez. La técnica del genio, pp. 11-12.

81. Corpus velazqueño, p. 157.

82. Marías (1999), p. 165.

83. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 173.

84. abcdefgh Harris, «Inocencio X», pp. 203-213.

85. Palomino, pp. 238-239.

86. ab Stoichita, pp. 367-379.

87. Salort, pp. 110 y 308.

88. Palomino, p. 307.

89. Corpus velazqueño, p. 151.

90. Corpus velazqueño, pp. 182-185 y 290.

91. Salort, p. 454.

92. Gombrich, p. 408.

93. Prater, El Barroco, pp. 223 y 272.

94. ab Ragusa, «Las obras maestras», p. 144. Sin embargo, se sabe por un documento dado a conocer por Pita Andrade, que la Venus se encontraba en Madrid al menos desde el 1 de julio de 1651 en la colección de Gaspar de Haro y Guzmán, marqués del Carpio, con anterioridad al regreso de Velázquez de Italia, por lo que López-Rey (1996, pp. 260-262), Marías (1999, p. 169) y otros adelantan su ejecución al periodo comprendido entre 1644 y 1648.

95. Pacheco, El arte de la pintura, p. 377.

96. Calvo Serraller, op. cit., p. 94.

97. Marini, p. 32.

98. Prater, Venus ante el espejo, p. 86.

99. Gállego, op. cit., p. 114.

100. abc Azcarate, Velázquez pintor de la luz, p. 14.

101. abcdef Brown, Velázquez. La técnica del genio, p. 13.

102. Harris, «Biografía», pp. 427-428.

103. Harris, «Biografía», pp. 427-428.

104. Corpus velazqueño, p. 344.

105. Corpus velazqueño, pp. 444-446 y 448-449 breves pontificios; pp. 449-450, resolución del Consejo; p. 451, concesión del título de hidalgo.

106. Bardi, Documentación sobre el hombre y el artista, p. 85.

107. Hellwig, pp. 129-135.

108. Harris, «Biografía», p. 423.

109. Alcalá Zamora-Pérez Sánchez, pp. 36-40.

110. Alcalá Zamora-Pérez Sánchez, pp. 52-53.

111. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 266.

112. Ragusa, «Breve antología crítica», p. 188.

113. abcdefghi Brown, Velázquez. La técnica del genio, pp. 16-20.

114. ab López-Rey, Velázquez, pp. 122-127.

115. Pacheco, El arte de la pintura, pp. 208 y 527-528.

116. Diego Angulo Iñiguez, Velázquez. Cómo compuso sus cuadros, Sevilla, 1947, pp. 54-63.

117. Palomino, p. 220.

118. abc Gudiol, Velázquez, pp. 318-319.

119. López-Rey, 1996, números 74 y 75, pp. 184-186.

120. Morán Turina y Sánchez Quevedo, op. cit., p. 228.

121. Brown, Velázquez. La técnica del genio, p. 17.

122. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 267-9.

123. Palomino, p. 231.

124. Palomino, p. 215.

125. abcd Ragusa, «Breve antología crítica», pp. 180-182.

126. Corpus velazqueño, vol. II, p. 632: «che ha si maestrevolmente unito al disegno Romano il Veneziano colorito».

127. Alcalá Zamora-Pérez Sánchez, pp. 50-51. Los comentarios de Félibien fueron recogidos por Antonio Ponz en su Viaje fuera de España (1785), oponiendo a ellos el «alto grado de estimación» en que Mengs tenía la pintura de Velázquez, para criticar el escaso conocimiento que de la pintura española tenían los críticos franceses, «con el fallo de que tal país [Francia] no ha dado grandes pintores», Corpus velazqueño, p. 654.

128. Corpus velazqueño, vol. II, p. 646.

129. Corpus velazqueño, vol. II, p. 655.

130. Corpus velazqueño, p. 633.

131. Calvo Serraller, op. cit., pp. 131-3.

132. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 307-8.

133. ab Ortega y Gasset, La fama de Velázquez

134. Herzer, op. cit., pp. 7-10.

135. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 169.

136. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 183.

137. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 306-7.

138. Gállego, op. cit., pp. 193-204.

139. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p.222.

140. Harris, «Velázquez y Gran Bretaña», pp. 333-337.

141. abc Pérez Sánchez, Velázquez y su arte, pp. 37-38.

142. abc López-Rey, Velázquez, p. 17.

143. ab Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, pp. 84-87.

144. Pérez Sánchez, Escuela española, p. 118.

145. ab Calvo Serraller; Las Meninas de Velázquez; p. 9-30

146. ab Pérez Sánchez; Velázquez, Catálogo Exposición 1990; p. 46-50

147. Brown, Velázquez. La técnica del genio, pp. 181-194.

148. ab Gudiol; Velázquez; p. 289-290

149. Palomino, pp. 248-251.

150. abcd Gallego; Velázquez, Catálogo Exposición 1990; p. 324-328

151. Citado en Gilles Knox, Las últimas obras de Velázquez, p. 132.

152. López-Rey (1978), Velázquez, pp. 156-164.

153. Calvo Serraller; Las Meninas de Velázquez; p. 34-36

154. Calvo Serraller; Las Meninas de Velázquez; p. 61-63

155. abc Calvo Serraller; Las Meninas de Velázquez; p. 290-291

156. Garrido; Velázquez, Técnica y Evolución; p. 582-590

157. Brown, Velázquez. Pintor y cortesano, p. 252.

158. abc Brown, Velázquez. La técnica del genio, pp. 200-204.

159. López-Rey, Velázquez, pp. 135-136.