Compra el maíz – dijo -. Ya sabrá Dios cómo hacemos nosotros para arreglarnos.

«Éste es el milagro de la multiplicación de los panes (это чудо умножения хлебов)», repitió el coronel (повторял) cada vez que se sentaron a la mesa en el curso de la semana siguiente (каждый раз когда садились за стол в течение следующей недели). Con su asombrosa habilidad para componer, zurcir y remendar (со своим удивительным мастерством чинить, штопать и латать), ella parecía haber descubierto la clave (казалась открыла ключ (код)) para sostener la economía doméstica en el vacío (чтобы поддерживать домашнюю экономику в пустоте). Octubre prolongó la tregua (продлил передышку (перемирие)). La humedad fue sustituida por el sopor (влажность была замещена на сонливость). Reconfortada por el sol de cobre (ободренная солнцем из меди) la mujer destinó tres tardes a su laborioso peinado (посвятила три вечера своему трудоемкому причесыванию). «Ahora empieza la misa cantada (сейчас начинается месса (которую проводит с пением один священник))», dijo el coronel la tarde en que ella desenredó las largas hebras azules (распустила длинные голубые нити (имеются ввиду волосы); red - сеть, enredar - запутывать, azul - голубой) con un peine de dientes separados (гребнем с отделенными зубцами; separar - отделять, diente - зуб). La segunda tarde (вторым вечером), sentada en el patio con una sábana blanca en el regazo (сидя во дворе с белой простыней на коленях), utilizó un peine más fino (использовала гребень более тонкий) para sacar los piojos (чтобы достать вшей) que habían proliferado durante la crisis (которые расплодились во время кризиса). Por último se lavó la cabeza con agua de alhucema (в последний умыла голову водой с лавандой), esperó a que secara (подождала пока высохнет), y se enrolló el cabello en la nuca en dos vueltas (и закатала волосы на затылок в два поворота) sostenidas con una peineta (поддерживаемых расчесочкой). El coronel esperó (подождал). De noche, desvelado en la hamaca (ночью, бодрствующий в гамаке), sufrió muchas horas por la suerte del gallo (переживал много часов за удачу (судьбу) петуха). Pero el miércoles lo pesaron y estaba en forma (но в среду его взвесили и был в форме (петух)).

Esa misma tarde (этим самым вечером), cuando los compañeros de Agustín abandonaron la casa (когда друзья Августина покинули дом) haciendo cuentas alegres sobre la victoria del gallo (делая веселые расчеты по поводу победы петуха), también el coronel se sintió en forma (также полковник почувствовал себя в форме). La mujer le cortó el cabello (ему обрезала волосы). «Me has quitado veinte años de encima» (мне сняла двадцать лет «сверху»), dijo él, examinándose la cabeza con las manos (исследуя голову руками). La mujer pensó que su marido tenía razón (подумала, что ее муж прав; razon - правота).

-Cuando estoy bien soy capaz de resucitar un muerto (когда в хорошей форме, способна воскресить мертвого; estar bien - быть в порядке) - dijo.

 

Eacute;ste es el milagro de la multiplicación de los panes», repitió el coronel cada vez que se sentaron a la mesa en el curso de la semana siguiente. Con su asombrosa habilidad para componer, zurcir y remendar, ella parecía haber descubierto la clave para sostener la economía doméstica en el vacío. Octubre prolongó la tregua. La humedad fue sustituida por el sopor. Reconfortada por el sol de cobre la mujer destinó tres tardes a su laborioso peinado. «Ahora empieza la misa cantada», dijo el coronel la tarde en que ella desenredó las largas hebras azules con un peine de dientes separados. La segunda tarde, sentada en el patio con una sábana blanca en el regazo, utilizó un peine más fino para sacar los piojos que habían proliferado durante la crisis. Por último se lavó la cabeza con agua de alhucema, esperó a que secara, y se enrolló el cabello en la nuca en dos vueltas sostenidas con una peineta. El coronel esperó. De noche, desvelado en la hamaca, sufrió muchas horas por la suerte del gallo. Pero el miércoles lo pesaron y estaba en forma.

Esa misma tarde, cuando los compañeros de Agustín abandonaron la casa haciendo cuentas alegres sobre la victoria del gallo, también el coronel se sintió en forma. La mujer le cortó el cabello. «Me has quitado veinte años de encima», dijo él, examinándose la cabeza con las manos. La mujer pensó que su marido tenía razón.